miércoles, 13 de junio de 2012

Chicas normales

Cuando éramos chicas, a mi hermana y a mí mamá no nos dejaba ver televisión. O nos dejaba ver UNA hora por día, previa selección de los programas que podíamos elegir: nunca Señorita Maestra, o Clave de Sol, o El Show de Benny Hill. Ni ningún otro que pudiera ejercer malas influencias en nuestro intachable comportamiento. Esos los teníamos que mirar a escondidas, haciendo un zapping veloz y con el corazón saliéndose del pecho por la emoción de lo prohibido; saltábamos del piso a la televisión cuando mamá se alejaba (no teníamos control remoto en esos años) y los intercalábamos unos segundos con Heidi o Rainbow Brite. Pobre mamá, seguramente pensaba que de esa manera nos protegía de las corrupciones del mundo exterior. Nos mandó a un colegio de monjas de medio turno y nos hacía pasar las tardes libradas a nuestra propia imaginación, intercalando clases de inglés o de gimnasia deportiva, algunas muñecas y muchos libros.
Crecí como una lectora voraz: consumí literatura rusa, Patoruzito, Agatha Christie, DH Lawrence y Corín Tellado. Todo lo que pasaba por mis manos era devorado y absorbido en pocas horas, con las previsibles consecuencias para mi joven cabeza. A los 15 años me sentía una mezcla de Huckleberry Finn y una meretriz asiática, según el momento. Mis relaciones se caracterizaron por la imaginación desbordada, el sexo precoz, las infidelidades y el drama novelesco.
Nunca pude ser normal, aspiración máxima de mamá, que creyó que con una hora de televisión por día nos había salvado.

10 comentarios:

D. dijo...

Hola PDT:

Comprendo lo que decís... pero:

Lo "normal" no es un paradigma o parámetro, sino para aquellos que lo toman como tal.

De no haber sido como fuiste, no pensarías como ahora lo hacés.

"El conocimiento no justifica la fe, por el contrario nos lleva siempre a la transgresión".
(Sor Juana de La Cruz, quien era La Peor de Todas ¿y Todos?).

Besos A., te leo siempre en un break.

La Peor de Todas dijo...

Qué bueno que siempre tengas un rato en tus breaks para la Peor! ;-)
Así es, el conocimiento es un arma de doble filo: pero siempre gratificante en sí mismo. En mi caso, me sirvió para darme cuenta que "normal" no era lo que me interesaba, jaja.
Qué pasa con las Crónicas? Pasé y no hubieron actualizaciones!

Rochies dijo...

yo aplaudo a la esencia innata que hizo que nada deje de ser lo que debía ser; la peor de todas.
Me supo trasladar a esos pasados mágicamente. Los suyos y los míos.
Sólo me queda la duda del sexo precoz y de las infidelidades :o Propias, ajenas, precoz por veloz, precoz por temprano...

PD, el choque planetario continúa siendo mercuriano :P

Sil dijo...

A mí no me dejaban ver Clave de Sol, ni Jugate Conmigo, ni Grande Pá, pero sí Benny Hill xD

Y no, tampoco soy normal.

La Peor de Todas dijo...

Querida Rochies, gracias por el aplauso; yo todavía tengo mis dudas! ;-)
El sexo precoz fue mío, naturalmente. Y las infidelidades de todos lados, por supuesto! Qué se creía, que soy puro bla bla?! ;-)

Sil, yo todavía no descubro quién es el normal, pero todos insisten en usar la palabra como ejemplo paradigmático!

La Peor de Todas dijo...

Rochitas: Ah, y era precoz por temprano y precoz por los problemas de mi compañero, jajaja!

FILOMENA dijo...

jaja suena familiar.
La pregunta es por que prohibir la tele y agregale a eso toda una jornada vestida igual que otras chicas con uniformes azules, formando filas militares de niñas muertas de miedo por crucifijos y monjas amenazantes.
Es como vestir a tu hijo de cabernícola y pedirle que actúe normal

Cathyrmay dijo...

fui a escuela de monjas y jamas meteria a mi hija en una escuela donde solo hay chicas... no no no!

Anónimo dijo...

ja ja, misma aspiracion de "normalidad" tenian mis padres para mi... y misma desilusion experimentaron, jaja. Igualmente, dame una mujer imaginativa, precoz sexualmente y novelezca mil veces antes que un embole que conforme con lo que definen como normal en Buenos Aires! x La de OZ

Anónimo dijo...

oops, quise decir noveleSca! muchos anos fuera del pais y tengo el idioma deformado! La de OZ